Los malos son menos
- Leo Eliseo
- Mar 10
- 1 min read
A veces parece que la calle es un campo de guerra, un tablero donde cada ficha es una amenaza, donde cada esquina es un aviso de muerte. Es la historia que nos cuentan en los noticieros, la que repiten los vecinos detrás de las rejas de sus casas, la que justifica patrullas y cámaras en cada poste.
Pero si sales, si caminas, si miras de verdad, te das cuenta de algo que no cabe en los titulares: los malos son menos.
El crimen no es un espectro que lo cubre todo, no es la esencia de nuestra tierra. Es ruido, pero no la melodía. La mayoría de la gente no quiere violencia, no vive con un revólver en la mano ni con la intención de joder al prójimo. La mayoría se levanta temprano, trabaja, sueña, ríe. La mayoría ayuda sin esperar nada a cambio. La mayoría quiere vivir en paz.
Sí, hay crimen. Hay hambre. Hay sangre que se derrama donde no debería. Pero no es porque estemos condenados, no es porque la maldad sea la norma. Es porque el sistema ha fallado, porque la educación es una ruina, porque las oportunidades son un chiste contado con los bolsillos llenos desde una oficina con aire acondicionado.
Los malos son menos. Pero hacen más ruido. Y el miedo vende.
Que no nos engañen. Que no nos conviertan en prisioneros de un terror fabricado. Porque la calle no es de ellos. La calle es de la gente. De la gente buena, que es más.
Comments